Isla Meteca es un lugar imposible
perdido en los mares de la literatura fantástica.
"Sierpe fue durante mucho tiempo la única ciudad de Isla Meteca. Luego sucedió todo aquello… y cuando sucedió todo aquello hace ya tanto tiempo, la vieja ciudad de Sierpe quedó destruida en sus tres cuartas partes. Muchos fueron los que perdieron la vida. Ironías del destino, se salvó del desastre la Casa del Corregidor y poco más, la escuela, el embarcadero de Puerto Capistrano y unas pocas viviendas, apenas nada. Don Fabio, y con él el jovencísimo Vladimiro Rascón, lidió lo mejor que le fue posible con aquel caos. Ambos defendieron la vieja ciudad hasta quemar todos los cartuchos. Nadie podrá acusarles de falta de temple. Pero hubo que tomar una decisión, y así se fundó Ciudad Nueva. La consigna era abandonar la vieja ciudad a su suerte y mirar al futuro: llevar a Ciudad Nueva los edificios de Sierpe que no habían sucumbido al horror para levantarlos de nuevo, y empezar desde cero."
En Isla Meteca hay una ciudad abandonada llamada Sierpe. Antes de ser destruida cuando sucedió todo aquello… muchísimo tiempo antes, esta ciudad fue fundada por unos fabulosos monos marinos.